Aquello que olvidé en Kenia
Recomiendo no leer este relato sin haber leído los anteriores capítulos: Una puesta de sol El niño guerrero En días de disturbios Una vuelta al principio Cuando subí al coche le di al conductor la dirección de nuestra antigua casa. Sabía que Paul se enfadaría cuando descubriese que no había entregado la carta de Eva, pero pensé que tampoco tendría por qué enterarse. Y si algún día lo descubría, sería tarde y entendería que lo hice pensando en su bien y el de su familia. Pero… ¿qué estaba pensando? Paul me conocía lo suficiente como para notar en mi cara que le estaba mintiendo, en cuanto me preguntase si la había entregado y le dijera que sí. Tenía que pensar en algún plan mejor, como que la había perdido… pero eso no le impediría volverla a escribir… o tal vez esa fuera la solución, podría reescribirla yo, y zanjar el asunto definitivamente. El trayecto se me hizo muy corto, y mientras pensaba en el asunto de la carta, evité mirar por la ventanilla el recorrido que h