Baila bailarina
Recluida entre las cuatro paredes de aquel cuarto, soñaba con ser bailarina. Se imaginaba haciendo complicadas piruetas en el aire, girando sobre sí misma sin parar o deslizándose como una pluma arrastrada por el viento. Aquellas figuras representaban para ella una inalcanzable quimera.
También disfrutaba con sueños sencillos como salir a pasear a la calle y descubrir el mundo tras aquel ventanal. Pero el reloj jugaba en su contra y cada vez se sentía más frágil y apagada. A veces ni los sueños conseguían levantar sus esperanzas.
Cuando sintió que sus fuerzas habían llegado a su límite, en el último suspiro de vida, pidió un deseo, era lo único que le quedaba por intentar. Al instante, la joven que minutos antes había puesto agua en el jarrón, pudo sentir su perfume en la piel, y unas ganas irresistibles de bailar.
Realmente bonito, el relato y la foto. Supongo que la foto inspiró el relato. Digno uno del otro. Se echaba de menos... y mucho
ResponderEliminarEfectivamente, la foto inspiró el relato. En cuanto la vi no pude resistirme a escribir sobre ella
ResponderEliminarGracias, no sabía que se echaban tanto de menos mis letras :)
Te veo animada con los micros últimamente. Me ha encantado el resultado a partir de esta imagen. Preciosos ambos. Besotes, guapa.
ResponderEliminarY ya le he puesto BSO con la canción de Victor Manuel de fondo :) aislándome de la vorágine política de estos días y perdiéndome en este momento de sueños posibles,de ilusión verdadera.
ResponderEliminarUn abrazo!
(gane quien gane ojalá que se tomen en serio al país y sus problemas en lugar de tantas alegrías en los balcones,porque mañana volverá a ser lunes)
Pues sí que me quedó completa la entrada, ahora con banda sonora y todo!
ResponderEliminar¡Besotes y feliz lunes!